Jaldo respaldó los reclamos regionales y advirtió sobre la relación con Nación en la 22° Asamblea del Norte Grande

El gobernador Osvaldo Jaldo participó en Santiago del Estero de la 22° Asamblea de Gobernadores del Norte Grande, un encuentro que reunió a los mandatarios de la región en el Centro Cultural del Bicentenario. El anfitrión Gerardo Zamora encabezó la última reunión del año junto a Gildo Insfrán, Raúl Jalil, Ricardo Quintela, Hugo Passalacqua, Antonio Morocco, autoridades de Chaco y Corrientes y el gobernador electo de Santiago del Estero, Elías Suárez. Jaldo asistió acompañado por el ministro Regino Amado y el diputado Agustín Fernández.

Tras el izamiento del himno nacional, los gobernadores mantuvieron una deliberación que se extendió pasado el mediodía y concluyó con el traspaso de la presidencia pro témpore del cuerpo a Raúl Jalil. Durante el encuentro se discutieron reclamos históricos de la región, entre ellos el apoyo a La Rioja por el punto de coparticipación sustraído en 1988, la situación de las cajas previsionales no transferidas en Formosa, Misiones, Corrientes y Chaco, y la revisión de la norma que asigna el 1,9% de los recursos coparticipables a AFIP/ARCA, con la propuesta de que el excedente vuelva a las provincias.

También se analizaron inversiones estratégicas del plan maestro del Norte Grande en rutas, infraestructura ferroviaria y obras pluviales, y se decidió solicitar una reunión regional con el Gobierno nacional para discutir una agenda común frente al escenario económico actual.

Jaldo definió la asamblea como “muy positiva” y destacó la unidad de criterios alcanzada. Subrayó que los gobernadores lograron una declaración conjunta ante la compleja coyuntura que atraviesa el país. Recordó el perjuicio que padeció Tucumán al perder un punto de coparticipación en 1988 y respaldó el reclamo de las provincias con cajas previsionales propias: “Apoyamos que les devuelvan los recursos que les corresponden legítimamente”.

Consultado sobre la relación con la Nación, el mandatario tucumano planteó un panorama crítico. Afirmó que se rompió la dinámica de articulación que existía con gestiones anteriores y que hoy “no hay propuestas para obra pública ni políticas educativas, sanitarias, de seguridad o agropecuarias”. Señaló que el Gobierno nacional “concentra todo para sí, sin derramar a las provincias” y advirtió que, si no se modifican estas políticas, “va a tener dificultades para continuar”.

Sin embargo, valoró que funcionarios nacionales hayan comenzado a recorrer el país y a reunirse con los gobernadores. “Es fundamental que conozcan las realidades de cada región. Si no se resuelven los problemas en las provincias, no tiene sentido elegir un presidente”, enfatizó.