La próxima sesión será el 4 de diciembre y estará centrada principalmente en el análisis del proyecto presupuestario y en un paquete de leyes de emergencia enviadas por el Poder Ejecutivo.
Durante su exposición, el ministro detalló que el mismo contempla erogaciones cercanas a los $5 mil billones y proyecta un superávit de $708 millones.
La intención es que el análisis técnico y político avance de manera ordenada, de modo que el presupuesto pueda ser debatido en el recinto antes de fin de año.
El cálculo proyecta un resultado financiero prácticamente equilibrado, con un superávit simbólico cercano a los $600 millones.
El gobernador mantuvo reuniones para interiorizarse sobre los detalles del presupuesto, que según indicó, aún carece de información concreta.
El gobernador remarcó que las provincias no están pidiendo dinero “de la Nación”, sino lo que por ley les corresponde.
También se anticipa una mejora sostenida en el comercio exterior y en las importaciones.
Se promoverá la capacitación de organismos provinciales y se modernizarán los sistemas informáticos para mejorar la calidad de los datos y la capacidad de toma de decisiones.
El legislador lamentó que se pierda una “oportunidad histórica de definir el modelo de provincia que queremos”.
El funcionario se mostró en contra de los acoples y analizó que la propuesta tiene que servir para ayudar a la gente.